Volver a blog

La civilización micosia: sustento

Los micosios son fundamentalmente descomponedores y como tales no cazan. Aunque sí tienen una boca, su tracto digestivo modificado tiene la función de poder almacenar y descomponer la materia orgánica de forma cómoda para ellos pues, a diferencia de la mayoría de hongos puros, no son sésiles ni crecen sobre su sustento. Su sentido del gusto y del olfato está poco desarrollado, por lo que su gastronomía cuenta con sabores extremadamente fuertes. En la mayoría de casos, se alimentan de plantas y de los restos mortales de animales, lo que resulta en un estilo de ganadería bastante peculiar. Los micosios obtienen sus nutrientes de grandes recintos cercados que denominan granjas de descomposición. En realidad, no son más que pequeños ecosistemas creados a medida por ellos, donde crían plantas y animales compatibles y los dejan vivir, permitiendo que la naturaleza que siga su curso, aunque procurando gestionar con habilidad los ciclos de vida de los seres que allí habitan. Micosia Se trata en definitiva de concentrar su alimento en un solo lugar, y cuidarlo para que ninguna enfermedad se extienda y su eficiencia de producción sea la máxima posible. En la estación fría, los micosios cubren las granjas con unas lonas semitransparentes tejidas con las mudas de los whyrms, creando una especie de invernadero en forma de burbuja.

Comentarios